Para quienes se preguntan qué es grafología les respondemos que según el significado del término: La Grafología es el estudio de los grafismos. Es una técnica que estudia la escritura y toda la producción gráfica.
Mediante el análisis de la escritura manuscrita, se determina el perfil de personalidad de un individuo. Si bien parece imposible, un grafólogo entrenado, está capacitado para detectar toda la información de quien escribe con su puño y letra.
La grafología no es una ciencia, porque no cumple con los requisitos del método científico, tampoco es un test predictivo. La grafología no intenta adivinar nada.
Ésta técnica revela rasgos personales, aptitudes y capacidades, experiencias pasadas que han dejado huellas en la personalidad, problemas de salud física y psicológica. Estudios actuales aseguran que mediante la grafología es posible detectar las mentiras por medio de la letra escrita.
La grafología se basa en las técnicas proyectivas (que son instrumentos que revelan aspectos inconscientes de la conducta; facilitan que aflore a la superficie aquello que está anidado en nuestro inconsciente), en el psicoanálisis y en las neurociencias.
El acto de escribir consiste en ejecutar movimientos que (como todos los movimientos) depende del sistema nervioso. Este sistema nervioso posee como coordinador principal a “nuestro cerebro” quien envía a través de haces nerviosos los impulsos hacia la mano logrando la escritura.
El acto de escribir es mucho más complejo de lo que parece. Es notable que si escribimos con la mano derecha o con la mano izquierda, con el pie o la boca, los trazos serán similares (con mayor o menor destreza debido a que ambas manos poseen distinto entrenamiento). Está comprobado que el impulso proviene del cerebro. Mediante un circuito bidireccional entre los músculos de la mano y el sistema nervioso se plasma en el papel la imagen completa del escritor. La energía emocional que impacta en nuestro ser, en nuestros gestos y se evidencia a través de nuestra letra escrita.
El grafólogo actual es un especialista con formación y ética, que describe, interpreta y valida, los resultados que obtiene a través de la escritura manuscrita.
La escritura es como una huella digital, un gesto único e inigualable que nos distingue de los demás. A lo largo de la vida, la caligrafía aprendida en los primeros años, va evolucionando junto con la personalidad. El análisis grafológico requiere de un examen exhaustivo y meticuloso para hallar los rasgos individuales del escritor. El profesional va a examinar si el contexto gráfico está compensado o descompensado, si está alterado o perturbado. Esto se va determinando por diversos factores como el espaciado entre letras, palabras y renglones, si se chocan las letras de un renglón las del renglón siguiente, la presencia de lugares en blanco que no están escritos, el ancho de los márgenes. La cohesión entre las letras, si están todas unidas o no. La presión que se aplica al escribir, si deja huella del reverso del papel, el grosor del trazo, el color. La velocidad del trazado, si es rápido o lento.
El grafólogo que es un profesional entrenado, debe captar la existencia o la ausencia de armonía gráfica en un escrito. La armonía gráfica es el equilibrio en tiempo, forma y movimiento que integran los denominados vectores gráficos. La armonía de la que hablamos no está vinculada a la “linda letra”, carente de espontaneidad, monótonas, ni a escrituras excesivamente adornadas, no es la escritura caligráfica aprendida en épocas escolares signo de personalidades evolucionadas. Se espera que la escritura sea: espontánea, sin vacilaciones, sin titubeos, ni interrupciones en el trazo: Esto es impulso de letra normal. Cuando aparecen trastornos en el impulso gráfico originan alteraciones y a la pérdida de la integridad del escrito se las denomina perturbaciones (nos refiere la presencia de patologías).
Hay quienes afirman que la grafología es una técnica que no requiere de la presencia del entrevistado, pues no estamos de acuerdo. Es de suma importancia conocer datos como edad, sexo, nivel socio-cultural, si es diestro o zurdo, cómo toma la hoja, qué color y tipo de útil para escribir selecciona.
Si el consultante está consumiendo alguna medicación, o padece alguna enfermedad, tiene anteojos, si está atravesando alguna situación o circunstancia psicofísica especial o anormal, si está cómodo o nervioso. En fin esto va a facilitar al momento de la interpretación y la devolución que realice el grafólogo. Está comprobado los efectos que ciertas medicaciones y enfermedades tienen sobre el grafismo. Es recomendable analizar escritos anteriores de la persona con el fin de detectar variabilidad, evolución o fallos en la escritura.
Sigmund Freud introduce el simbolismo del espacio a la psicología. De acuerdo al simbolismo del espacio y de las formas, se describen los denominados vectores gráficos de la escritura.
Los vectores son fuerzas o direcciones cardinales que pueden tomar los gestos gráficos: Según hacia dónde se ubiquen serán considerados: Espiritual, Emocional, Biológico, de Contacto.
Vectores Gráficos
Vector “A” Espiritual en zona superior: Representa la imaginación, las aspiraciones sublimadas, las ambiciones de superioridad, la intelectualidad, del pensamiento abstracto, Es denominada por Freud en la teoría del aparato psíquico “Superyó”.
Vector “B” Biológico en la zona inferior: Representa la parte instintiva de la personalidad, las tendencias y necesidades físicas, materiales, orgánicas como la sexualidad, la nutrición. Las necesidades motoras como el movimiento físico, trabajo, deportes, cambio de ambiente, los intereses técnicos y prácticos que requieren del dominio de los sentidos. El apego al idioma, la familia, el país de origen, las costumbres también pertenecen a este vector. Para Freud en esta zona sitúa al al “ELLO”.
Vector “C” Emocional: En la zona media, Freud sitúa al “YO” quien representa el principio de realidad, al presente y a las tendencias afectivas del Yo en relación con sí mismo en el momento actual. En la base de las letras tenemos el límite con el inconsciente, donde se encuentra simbólicamente la “censura”. En la parte alta de la zona media, de las letras a, o, m, minúsculas, entre otras está el límite entre lo emocional y lo espiritual, entre de lo concreto y lo abstracto.
Vectores “I” y”D” de Contacto correspondientes a las zonas derecha e izquierda: Se dividen los vectores mencionados anteriormente con un eje imaginario que simboliza al “Yo” en la esfera izquierda (de letras, palabras, líneas y de toda la página) que representa los aspectos regresivos de no desprendimiento del seno materno, el “YO” inmaduro, los vínculos primarios, el pasado, la introversión, fijación en la etapa oral o anal, actitudes infantiles, actitudes femeninas.
Y la esfera Derecha que refleja a quien logró desprenderse del seno materno, generó crecimiento, un “YO” maduro, actitud adulta. Se refiere a las relaciones afectivas con el mundo, la comunicación, extraversión, y el avance hacia el futuro, proyección. Influencia de la imagen paterna, activa, agresiva, masculina.
Vectores Gráficos y la Grafología